Lectura en Frío (I)

Te conozco bastante bien, si vos, el que está leyendo este blog, se bastantes cosas sobre vos, ¿no me crees?, pues me vas a decir si me estoy equivocando, a ver me concentro…

Vamos a ver, sos una persona contradictoria, a veces sos sociable y confías mucho en las personas, pero en otras ocasiones sos reservado y distante, te das cuenta que no es bueno que todo el mundo sepa de inmediato todo de vos como un libro abierto. Te gustan los cambios, y te aburren las restricciones y limitaciones que se te imponen, también te puedo decir que sos una persona con ambiciones, de hecho tenés un proyecto entre manos, aunque no sabría decir a ciencia cierta cual es. En lo que respecta a las amistades, sos una persona abierta, que le gusta conocer más gente. En este momento tenés un problema en tu cabeza, no sabría decirte si hace poco, o si va a pasar dentro de poco o ya está ocurriendo en éste mismo momento, pero está cercano al presente…

¿Te he analizado con precisión?

Es verdaderamente impresionante ver como astrólogos, gitanos, adivinos y prestidigitadores son capaces de decir a las personas cosas de su vida personal y asuntos íntimos como si las conocieran desde hace tiempo. A veces las deducciones toman unos aspectos tan fuertes que la gente tiende a creer que en realidad estas personas tienen poderes sobrenaturales los cuales les permiten ver cosas que la ciencia no puede explicar, ¿Cómo hacen para saber tanto sobre uno? De hecho, estas deducciones no tienen nada de sobrenatural ni de paranormal, es una técnica que se conoce como lectura en frío.

La lectura en frío es una técnica que se aplica ya sea consciente o inconscientemente para extraer información de una persona y de esta forma hacerle creer que de alguna forma "misteriosa" se está obteniendo información acerca de un tópico. Básicamente lo que sucede es que la persona que domina la técnica (llamémoslo "lector en frío") solicita información al sujeto, pero sin nunca ser específico, de esta forma predispone a la otra persona a colaborar, y el lector en frío aprovecha cualquier manifestación mínima del entrevistado para hacer deducciones.

Analicemos por ejemplo esta frase: "Pronto resolverá algo que creía muy lejano, pero con la ayuda de compañeros. Llega alguien nuevo a su vida que le hará pasar buenos momentos. Hable con sus allegados, no deje que el silencio se adueñe del lugar. Sugerencia: permítase ser usted mismo, no tema mostrar lo que tiene dentro."

Examinando el texto anterior, podemos llegar a algunas conclusiones: el texto está creado para abarcar a prácticamente cualquier persona, sin importar sexo, raza, religión, etc.; todos tenemos alguna actividad, y si estamos predispuestos (tal como nos lo ha solicitado el lector en frío anteriormente), podríamos llegar a identificarnos con la frase. ¿A quien no le gusta pensar que el amor está mas cerca de lo que se imagina?, ¿Quién no tiene problemas por resolver?, ¿Quién no ha tenido problemas para abrirse a un grupo?. Como podemos ver, la frase anterior tiene un amplio abarque y el lector en frío lo sabe. Cada vez que nos hace algún comentario, naturalmente emitimos alguna respuesta, la cual es a menudo de forma inconsciente. Algunos ejemplos de respuestas ante una afirmación son: dilatación de las pupilas (signo de reacción emotiva), parpadeos, sudoración, movimientos faciales, de manos, cabezas y/o pies, entre otros.

Es importante resaltar que esta frase fue obtenida de manera aleatoria en una página de horóscopos en Internet: http://www.quehoroscopo.com/horoscopodehoy/tauro.html

De hecho, un buen lector en frío puede llegar a saber cosas de la persona sin tener que hablar con ella, no todo el lenguaje es hablado. El lenguaje corporal tiene una gran importancia y nos comunica en ocasiones más información; incluso aquella que el hablante no nos quiere revelar. La postura del cuerpo, las piernas cruzadas, el movimiento de las manos, la mirada y cientos de detalles más, revelan datos acerca de nuestra personalidad y nuestras intenciones que ciertos profesionales —psicólogos encargados de la selección de personal para una empresa, por ejemplo— saben leer como un libro abierto.

Nuestro cerebro tiende a hacer cosas como la asociación y la selección y de hecho, esto es la base del mecanismo que nos permite guardar cosas en nuestra memoria dependiendo de la relevancia que le otorguemos. De esta forma, el cerebro desecha la información irrelevante y así evita que nos "abrumemos" con toda la cantidad de cosas con las que lidiamos diariamente. Esto sugiere que por esta razón, en una conversación con un lector en frío, no le damos relevancia a las equivocaciones sino que simplemente las ignoramos y damos por sentado lo que lentamente el sujeto va desentrañando. 

Según la "guía de la lectura en frío", existen 13 aspectos a tener en cuenta para realizar esta actividad:

 

• Recordar que el ingrediente clave de una lectura en frío exitosa es la seguridad.
  

 

• Haga uso creativo de los últimos resúmenes estadísticos, encuestas y cuestionarios.
  

 

• Escoja bien el lugar para la lectura [en frío].
  

 

• Gánese la cooperación del sujeto con anticipación.
  

 

• Utilice algún comodín o truco como cartas de tarot, bolas de cristal, lectura de la palma de la mano, etc.
  

 

• Mantenga en la memoria una lista de frases de "relleno".
  

 

• Utilice todos sus sentidos.
  

 

• Haga que el sujeto le diga cosas de sí mismo.
  

 

• Sea un buen escucha.
  

 

• Dramatice su lectura.
  

 

• Siempre dé la impresión de que sabe más de lo que aparenta.
  

 

• No tema de halagar al sujeto en cada oportunidad.
  

 

• Recuerde la regla de oro: ¡siempre dígale al sujeto lo que el/ella quiere escuchar!.
  

  
   

En una próxima entrega, les explicaré cuales son los pasos adecuados para hacer una lectura en frío exitosa, espero que ésta primera entrega haya sido de su completo agrado.